Lo hemos venido destacando a lo largo del recuerdo de ediciones anteriores, y siempre nos parece poco el homenaje que merecen todas las personas voluntarias que han ido haciendo posible los diferentes talleres de formación impartidos durante el festival. FiSahara 2008 no podía ser menos y aquel año la lista de cursos creció, ampliando la familia de FiSahara.

Realización de uno de los talleres, a los que asisten muchas mujeres  (Juan Carlos Rincón)

Ya lo contaba entonces en los medios Tiba Sidihaiba, que toda persona que haya conocido los entresijos de este evento sabe que es una pieza esencial del mismo: «El festival es importante para conocer otras culturas, pero el objetivo es que en próximas ediciones puedan proyectarse también películas realizadas por saharauis». Esa fue siempre la meta de estos talleres, desde el principio, con el horizonte fijado en la creación de una escuela de cine saharaui.

Así las cosas, aquel año se impartieron los talleres de edición con Daniel Fernández Urdiales; de Cámara con Mariano Aguado; de Animación Historias de Arena y Piedras y de Cine Documental Documéntate (video superior) con la Asociación La Claqueta (Nuria Coco y Nuria García); de Producción Audiovisual con Natalia de Ancos Lara; de Fotografía con Luis Arellano; de Formación de Danza con Leire Guezala de Mier y de Técnicas en Textos Periodísticos con Sergio Rodrigo Ruiz, José Antonio Bautista García, Yasmina García Martínez y Salamu Hamudi Bachri.

FiSahara_MalagaHoy2008

 

Rodando durante uno de los talleres (Juan Carlos Rincón)

Este último taller de Textos Periodísticos tuvo algo de particular: estaba impartido por estudiantes de la Facultad de Ciencias de la Comunicación de la Universidad de Málaga (UMA). Entre quienes impartían el curso se encontraba Sergio Rodrigo, que avanzaba a Málaga Hoy que «vamos a dar un pequeño curso de técnicas periodísticas en dos colegios de educación infantil, un centro juvenil y otro de mujeres».

Aquel curso era la semilla de la que hablaba Manu Chao y que en el caso de Sergio había recogido en un viaje a campamentos unos meses antes. Y germinó, no sólo en aquel curso durante FiSahara sino en posteriores ediciones, a las que volvería impartiendo cursos y, tiempo después, como periodista de TeleSUR y EntreFronteras, desde donde mantendría su compromiso con el pueblo saharaui y el hermano palestino.

Esa es la magia de FiSahara. Decía el primer ministro de la RASD, Abdelkader Tales Omar, en una entrevista para El Mundo que «EI cine al servicio de las causas justas es el lema del festival al que el laureado actor español se sumó». Y de nuevo, otra semilla, la de Javier Bardem, que además de arrancar la plataforma todosconelsahara.com, junto al productor Álvaro Longoria comenzaría a trabajar entonces en Hijos de las nubes, la última colonia, el documental que vería la luz cuatro años después.