Cartel oficial de FiSahara 2015.

En 2015 llegó la XII edición de FiSahara dedicada a la Justicia Universal. La elección del tema no era casual: por aquel entonces, la Audiencia Nacional había imputado a once altos cargos y militares marroquíes por un posible delito de genocidio sobre la población saharahui. El abogado de la causa Manuel Ollé, presente en el festival, quería extender la causa, incluyendo los bombardeos de fósforo blanco y napalm lanzados por Marruecos el 19 de febrero de 1976. “Sentí un golpe en la cabeza y, de repente, tenía sangre por todos lados. La gente huía en todas direcciones, escarbaban en la arena para poder esconderse. Había sangre por todos lados y restos de humanos”, así relataba ese bombardeo a Público Sadyama Adjeteu, que apenas era una niña cuando Marruecos decidió que el pueblo saharaui tenía que ser exterminado.

Ollé tenía claro que aquellos hechos fueron un auténtico genocidio, a través de asesinatos y desapariciones forzadas trataron de eliminar de la faz de la tierra al pueblo saharui. Cometieron el delito pero, obviamente, no consiguieron su objetivo. Los saharauis siguen en pie 40 años después. Luchando por recuperar su tierra por la vía de la legalidad internacional”. Por eso era tan importante que se personaran ante el juez Pablo Ruz testigos como Abubekeren Ben-Nani Abdalame, de 70 años entonces, que recordaba en eldiario.es que “de repente se lanzaron las bombas. Había carne y huesos por todas partes”.

El festival de cine y Derechos Humanos (DDHH) sirvió aquel año para que el mundo entero conociera los horrores cometidos por Marruecos al pueblo saharaui, con testimonios de primera mano, saltando a la prensa internacional, con medios tan relevantes como, BBC The Economist o Middle East Eye, entre otros. Reforzando el mensaje, se proyectaron películas como Testigos de la memoria, de la directora Eztizen Miranda sobre la exhumación de fosas comunes en el Sáhara Occidental, y la mesa redonda principal estuvo centrada en todas las víctimas del conflicto del Sáhara, sirviendo de merecido homenaje a todas ellas.

Ollé junto a víctimas saharauis de los bombardeos por parte de Marruecos (Carlos Cazurro)

Dado el carácter internacional de FiSahara, esta Justicia Universal no se concentró únicamente en el pueblo saharaui, sino que abordó otras situaciones de terrible impunidad. Así, durante aquella edición también acudió el abogado estadounidense especialista en Justicia Universal Michael Ratner, presidente del Center for Constitutional Rights, que llevó al Pentágono a los tribunales por sus violaciones de DDHH contra los detenidos en la base de Guantánamo. Con Nora Morales de Cortiñas, cofundadora y presidenta de las Madres de Plaza de Mayo,  se vivió uno de los momentos más mágicos gracias al encuentro con las mujeres saharauis, madres también de desaparecidxs; o la proyección de películas como Granito de arena: Cómo atrapar a un dictador, de Pamela Yates y Paco de Onís sobre el proceso de genocidio en Guatemala de 1981-83.

Nora Morales de Cortiñas mirando la foto de su hijo desaparecido, en compañía de la ministra de Cultura (Carlos Cazurro)

Precisamente esta cinta se alzaría con la Camella Blanca, completando el palmarés el segundo premio para el director venezolano Darwin Dikó Cañas por Musawat, un cortometraje sobre un proyecto de integración para personas con discapacidad en los campamentos; y el tercero para el alumnado de la EFA Abidin Kaid Saleh por su serie de cortometrajes llamada Té sin té. Además, el Premio Mención Especial pasaría a llamarse en la XII edición de FiSahara Premio Eduardo Galeano, yendo a parar a la película mauritana Timbukturecogiéndolo uno de sus actores (Salem Dendou).

Cartelera oficial de FiSahara 2015.

Entre la lista de participantes de aquella edición figuraron también Tony Tabatznik (fundador de Bertha Foundation), Michael Ratner (abogado), Sara Ruíz (abogada), Oona Chaplin (actriz), Pepe Viyuela (actor), Lizzie Brocheré (actriz), Ahmad Jubeh (clown palestino), Justinas Vancevicius (Fest. Cine y DDHH Vilnius – Lituania), Odrej Kamenicky (One World Internat. Human Rights Documentary Film Festival), Darwin Dikó Cañas (director), Yslem, Hijo del Desierto & su grupo Nosotros Family (clausuraron el festival), Mohamed Mhamdi (director), Diana Nava (directora), Laura Sipán (directora) y Xabier Luna (director).

El festival aprovechó su presencia para otorgar un Premio Especial de DDHH a Nora Morales de Cortiñas cuyo hijo, Gustavo Morales, fue desaparecido en 1976 por la Junta Militar Argentina, a lo que dedicaremos merecida cobertura.