El 26 de enero, FiSahara anunció el lanzamiento del catálogo online más extenso de películas del Sáhara Occidental. Desarrollado por la ONG Nomads HRC, esta base de datos recopila películas hechas por cineastas internacionales, periodistas, activistas, estudiantes, organizaciones solidarias y, más recientemente, por los mismos saharauis que han comenzado a crear la cinematografía saharaui.

Paul Laverty en FiSahara 2003 (Joss Barrat)

El guionista escocés Paul Laverty, que se unió a nosotrxs en la primera edición de FiSahara en 2003, ha compartido con el festival sus impresiones sobre esta nueva base de datos:

Hace cerca de 20 años, tuvimos el privilegio de viajar a la primera edición del festival de cine FiSahara que tenía lugar en los campamentos de población refugiada saharaui en 2003. Bajo la Vía Láctea y a la intemperie, presentamos nuestra película ‘Sweet Sixteen’ (dirigida por Ken Loach).  El equipo joven terminó los subtítulo en árabe apenas 15 minutos antes de la proyección.

Compartir nuestro mundo con el suyo fue una experiencia impresionante. A menudo me vienen a la cabeza lxs niñxs con los que me crucé en aquel viaje, que ahora rondarán los 25 años, y seguirán ancladxs en el mismo campamento.  Qué traición de la comunidad internacional, desde la ONU a la Unión Europea, España y, por supuesto, Marruecos. Estas personas valientes, de principios, han sido abandonas y olvidadas, y todas las promesas que se les hicieron se han roto. A pesar de ello, siguen resistiendo y luchando por la justicia.

«Espero que este magnífico recurso sea de provecho para los festivales de cine y las instituciones académicas»

Es muy inspirador conocer el catálogo de películas creado por Nomads HRC. Una simple mirada a los títulos es suficiente para percibir la creatividad y determinación de estos cineastas que contarán sus propias historias con su propia voz. Suenan vitales y humanos. Espero que este magnífico recurso sea de provecho para los festivales de cine, las instituciones académicas y muchos más. A veces basta maravillarse con el espíritu humano, como uno se maravilla con la Vía Láctea.

Mucha solidaridad y respeto.